Anda el Sevilla FC en estas
fechas inmerso en la planificación de la nueva temporada 2016-2017, pero antes
me gustaría reflexionar sobre la recién concluida 2015-2016.
El curso finalizado tiene
que calificarse de éxito, pues se consiguió el objetivo de clasificarse de
forma directa para la UEFA Champions League, algo que se perseguía desde el
comienzo. Y se hizo volviendo a conseguir por tercera vez consecutiva la UEFA Europa
League, y son ya cinco, los títulos que dispone el Sevilla FC en sus vitrinas,
para orgullo de sus aficionados. Pentacampeones de una competición que nos ha
dado la gloria. Algo muy grande.
Pero por el contrario, en
la Liga española el equipo se mostró muy irregular, siendo incapaz de conseguir
una victoria fuera de casa, quedando séptimo clasificado, que de no conseguir
el título europeo que nos dio la el pase directo para la máxima competición
continental, sólo nos habría permitido jugar dos previas para en caso de
superarlas, entrar en la Europa League. Y en cuanto a la Copa del Rey se llegó
a la Final, quedando subcampeones.
Por todo ello, y teniendo
en cuenta el papel desempeñado en las tres competiciones en donde se participó,
mi nota media sería de Notable.
Pero volviendo al tema de
la planificación, quizás lo más destacado sea la marcha del entrenador de forma
unilateral, en busca de mayores ingresos económicos. Un entrenador, que
respetando todas las opiniones, y aún teniendo en cuenta los títulos
conseguidos durante su estancia en el banquillo Sevillista, personalmente no me ha terminado de convencer. Para suplirle, el Club ha apostado por el argentino Jorge Sampaoli,
del que esperemos sepa sacarle todo lo máximo, a la plantilla que la entidad
nervionense va a poner a su disposición, pues la temporada próxima se presenta
ilusionante con la participación en Champions y con las dos finales de
Supercopas a disputar en Agosto (nacional y europea). La cuenta atrás ha
comenzado.